viernes, 20 de abril de 2018

GANGÉTICO


Gangético: perteneciente o relativo al río Ganges.


     Los anglosajones poseen el adjetivo gangetic —procedente del latín— para referirse a lo perteneciente o relativo al Ganges, célebre río de la India.

     Aunque el DLE solamente recoge transgangético ('lo que está al norte del río Ganges'), la propia Academia acredita la casticidad de gangético —cuyo uso se remonta a la época clásica—, pues ofrece en su fichero una cita de la obra Tractado de las drogas y medicinas de las Indias Orientales [1578], del escritor José de Acosta:

     «… entre los nardos índicos hay uno que se llama gangético, por respecto del río Ganges…» (página 176).

     También lo empleó Cristóbal Suárez de Figueroa en su versión de la Plaza universal de todas ciencias y artes, de Tomaso Garzoni:

     «En el golfo gangético —tras la boca del Ganges, llamada Antíboli— se halla Pentápoli y Baracura, con el río Latameda» (página 153 de la edición de 1615; página 166 de la edición de 1629).


     Lexicógrafos de los siglos XIX y XX incluyeron el vocablo en sus diccionarios particulares (Domínguez, Zerolo, Toro y Gómez, Alemany…).

 


                                                                               Fuentes

     Fichero general y NTLLE de la RAE (fecha de consulta y enlace: 20 de abril de 2018).

     Libros de dominio público de GOOGLE BOOKS (fecha de consulta y enlace: la misma).



 
 
 
 

miércoles, 18 de abril de 2018

PACTOS




     Nuestros políticos dicen que quieren llegar a acuerdos y pactos en lo tocante a la educación; aunque, cuando se ponen a hablar, no acuerdan ni pactan nada. No debemos extrañar, por tanto, que en España no haya todavía un plan general que, con ánimo de perdurar en el tiempo, regule la materia de manera armónica y uniforme.

     Ya llevamos muchísimo oyendo que la educación es demasiado importante para andar cambiando las leyes y los planes cada vez que cambia el partido del Gobierno, que hay que anteponer los intereses generales a los particulares, que hay que pensar en los futuros compatriotas… Todo esto, al fin y al cabo, no es sino mera palabrería porque cada partido odia a los demás y, en el fondo, no desea entenderse con ellos. Por eso, barruntamos que, aunque se alcanzara el tan deseado pacto, como su infracción no tendría ninguna consecuencia jurídica, nada impediría que los mismos que lo firmaran lo rompieran después.

    En los meses en que nuestros representantes han estado hablando de educación han tocado muchas cosas (o dicen que las han tocado). Al parecer, en lo que más se han centrado ha sido en lo económico y en las relaciones entre la educación pública y la concertada; pero, por lo que se lee en los periódicos, se han olvidado de algo tan elemental como es su propia lengua.

     Porque, a pesar de la cada vez mayor presencia del inglés en los centros de enseñanza, no nos consta que nuestros representantes hayan debatido la forma de asegurar la supervivencia tanto del castellano o español —lengua oficial del Estado— como de los idiomas regionales. Por el contrario, parecen determinados a mantener eso que se llama bilingüismo, cuyo sentido no está muy claro (ya que unas veces significa que se dan dos o tres asignaturas en inglés; y otras, que se dan dos o tres asignaturas en español y el resto en inglés). En cualquier caso, lo único claro es que se quiere mantener el inglés como lengua de enseñanza, por lo que, si bien se considera, no debería recibir el nombre de bilingüismo, sino el de anglicanización. ¿O eso del bilingüismo no admite portugués, francés, alemán, chino, italiano, ruso, esperanto o interlingua?
     Por otra parte, tampoco sabemos por qué hay favorecer el bilingüismo y no el trilingüismo o el plurilingüismo (que ahora también defienden muchos de los que hasta hace poco defendían solamente el bilingüismo).

     Ni que decir tiene que a ninguno de nuestros representantes se le ha ocurrido que debería introducirse en la legislación española un principio como el que proclama la ley francesa de Toubon:

     «La lengua de la educación, de los exámenes y los concursos, así como de las tesis y disertaciones en las instituciones públicas y privadas de enseñanza es el francés, salvo las excepciones que justificadamente se acuerden para la enseñanza de idiomas o culturas regionales o extranjeras, o cuando los profesores sean asociados o invitados» (artículo 11).




 

miércoles, 11 de abril de 2018

SENSIFICAR


Sensificar: hacer sensible.
 
 

     Sensificar es verbo procedente del latín. Significa ‘hacer sensible’.

     La lengua inglesa tiene to sensify, pero nosotros no decimos sensificar por influencia anglosajona. Su uso se remonta a la época clásica, como vemos en estas citas:

     «Tres cosas hace el alma en el cuerpo, que son vivificar, sensificar y regir: dar vida, dar sentido y dar regimiento al cuerpo» (Juan Francisco de Collantes, Divina predicación del soberano rey constituido sobre el monte santo de Sion, tomo II [1618], página 168, columna 2).

     «… esta es un espíritu de vida que crio Dios a su imagen y semejanza, que da vida y sensifica al cuerpo…» (José Maldonado, El más escondido retiro del alma [1649], página 73, columna 1).

     «… porque por ellos se mueve y siente la masa de carne que es el cuerpo, a que está unida estrechamente el alma, que le sensifica…» (ibidem, página 78, columna 1).


     No lo hallamos en el DLE, aunque sí en diccionarios de algunos lexicógrafos particulares (Domínguez, Zerolo y Rodríguez Navas).



                                                                                Fuentes

     Libros de dominio público de GOOGLE BOOKS (fecha de consulta y enlace: 11 de abril de 2018).

     RAE, NTLLE (fecha de consulta y enlace: la misma).





 

ESPLENDOROSIDAD





     El sustantivo esplendorosidad (derivado de esplendoroso) tiene algo de uso, aunque no se halla en el DLE.

     Nació en la época clásica, como acredita la siguiente cita de la obra de Antonio Pérez Ramírez Armas contra la fortuna [1698]:

     «… todas estas gracias y prendas fueron materia para el odio y despertador de la envidia; que una excesiva esplendorosidad ¿cuándo la pudo ver una achacosa vista? Siempre fue la excelencia objeto de la envidia…» (página 17).




     Texto sacado de libros de dominio público de GOOGLE BOOKS (fecha de consulta y enlace: 11 de abril de 2018).






miércoles, 4 de abril de 2018

NUMIDIANO


Númida o numidiano


     El adjetivo númida, según el DLE, significa ‘natural de una antigua región norteafricana llamada Numidia’ y ‘perteneciente o relativo a dicha región’. Númida se usa también como sustantivo cuando tiene el primer significado.

     A veces se oye numidiano, que se parece muchísimo al inglés numidian; pero no puede considerarse anglicismo porque su uso remonta a la época clásica. 

     La propia Academia, en su CORDE, ofrece buen número de citas, de las cuales copiamos aquí algunas:


     —  Guerra de Yugurta, de Cayo Salustio Crispo, de Francisco Vidal de Noya [1493]:

     «… fue aliado por amistanza con Masimisa, rey de los numidianos…».

     «A esto ayudaban las voluntades de los numidianos, encendidas en amor de Yugurta».

     «… un alférez de la tercera legión dio lugar de entrada a los enemigos por la guarnición que había tomado para defender, la cual rompieron los numidianos».

     «… por cuando había gran mengua de pan, porque los numidianos no se trabajan por arar y sembrar…».


     —  Coloquios matrimoniales, de Pedro Luján [1550]:

     «En el Libro de la alabanza de las mujeres dice Plutarco que las mujeres de los numidianos siempre tenían cerradas las puertas mientras sus maridos no estaban en casa…».
 

     —  Espejo de príncipes y caballeros, parte II, de Pedro de la Sierra [1580]:

     «El tiempo los guio al puerto numidiano…».

     «Bien oyeron todas estas amenazas los que en la muralla estaban, los cuales fueron a se las decir al rey numidiano…».



                                                                             Fuentes

     REAL ACADEMIA ESPAÑOLA: Banco de datos (CORDE) [en línea]. Corpus diacrónico del español. <http://www.rae.es> [Fecha de la consulta: 4 de abril de 2018].